El miedo a hablar en público es el número uno en la lista de “fobias” que tienen bastante gente.
La fobia se define como un temor persistente o profundo a un preciso objeto, actividad o situación.
El miedo a hablar públicamente es un género de fobia popular que a menudo se asocia o se desarrolla a lo largo de la adolescencia de una persona.
¿De qué forma reaccionaría si su jefe le dijera de súbito que debe hacer una presentación frente a sus colegas?
Si la iniciativa de tener que ponerse de pie y hablar frente a una multitud es suficiente para desencadenar ataques de pánico, entonces tienes este tipo de fobia.
De la misma con todos los modelos de temor, puede aprender a lidiar con su ansiedad de hablar en público reconociendo primero los síntomas.
¿Quién sabe? En el momento en que esté allí, eventualmente se percatará de que es bueno para ofrecer alegatos o dirigirse al público e incluso para ganarse la vida.
La multitud siempre y en todo momento tiene apetito de información y no hay mejor manera de mantenerla informada que haciendo presentaciones y discursos sobre ciertos temas que ya “domina”.
Manifestaciones físicas del miedo a hablar en público.
Primero, vea las manifestaciones físicas y mentales de una persona que tiene miedo de hablar en público.
Nerviosismo
Estar inquieto antes del día de su alegato tiene numerosos síntomas físicos, que son los siguientes:
- Tiene mariposas en el estómago.
- Tus palmas están sudando.
- Le tiemblan las manos.
- También le tiemblan las rodillas y siente que sus piernas están a puntito de colapsar.
- Su corazón late considerablemente más veloz de lo común.
- Tiene un ligero mareo o una sensación de “desmayo”.
- Tiene malestar estomacal
- Su cara está roja y su boca seca.
- Siente “sudor frío” por todas partes.
- Pensamientos de “pavor”.
Todos los síntomas anteriores son bastante normales en varias ocasiones. No obstante, si los prueba en exceso, es posible que deba buscar asistencia técnica.
La ansiedad por charlar en público asimismo podría desatar varios “pensamientos de pavor”.
Posiblemente le preocupe que alguien en la audiencia sepa mucho más sobre esto que .
Temes que brote una pregunta que no logres responder.
Tiene temor de equivocarse a fin de que todos logren ser testigos.
En verdad, puede encauzar estos pensamientos negativos hacia un resultado mucho más positivo, lo que da como resultado un alegato espontáneo, altamente informativo e incluso divertido.
Al admitir los síntomas y aprender a lidiar con su miedo, ocasionalmente aprenderá a llegar a su audiencia y hacerlos agradables y también informativos, tanto para usted para su audiencia.