El self coaching es un proceso que permite guiar nuestro crecimiento y desarrollo personal y profesional a través del pensamiento dirigido y consciente. Puede traducirse como “autoinstrucción”, es decir, el entrenamiento a sí mismo con el objetivo de lograr objetivos y metas.
En este tipo de coaching, no se requiere de un coach personal. No obstante, no pretende sustituirlo, ya que es esencial para esclarecer y sacar a luz las motivaciones de la persona. Si es cierto que, a largo plazo, la persona debe desarrollar su potencial por sí mismo. Por ello, se aconseja contar con un coach personal al iniciar el proceso y continuar con self coaching como complemento.
Self coaching y sus metas
El self coaching es desarrollado por aquellas personas que deciden alcanzar sus sueños o metas en su vida. No únicamente en el ámbito personal, sino también en el profesional. Gracias a la consecución de acciones planteadas en el plan de acción se logra:
- Equilibrar la autoestima y la automotivación para alcanzar los objetivos.
- Entrenar la técnica de la visualización y la toma de consciencia.
- Potenciar la responsabilidad relacionada con la satisfacción de las necesidades.
- Incentivar el desarrollo creativo para la resolución de conflictos.
Self coaching y sus fases
El primer paso dentro del proceso del self coaching, está destinado al autoconocimiento. Identificar el posicionamiento personal y conocernos a nosotros mismo es vital para establecer las estrategias adecuadas. Es necesario contar con las siguientes fases dentro del autoconocimiento.
1. IDENTIFICACIÓN DEL SEL COACHING
En esta primera fase de toma de conciencia, se identifican aquellos recursos de los que disponemos:
- Medios materiales
- Medios Económicos
- Disponibilidad de tiempo
- Puntos fuertes/débiles
2. VALORACIÓN DEL SELF COACHING
En esta fase se valoran los recursos disponibles y se observan los sentimientos respecto a las perspectivas de consecución para lograr el objetivo o meta.
3. ALTERNATIVAS AL SELF COACHING
Una vez determinados los recursos disponibles, nos centramos en la fase de preparación del plan. Ahora sabemos en qué posición estamos, sólo necesitamos determinar aquellas alternativas para la consecución del objetivo.En este momento nos realizaremos las siguientes preguntas:
- ¿Cómo podemos mejorar los puntos débiles?
- ¿Cómo podemos conseguir aquellos recursos que nos faltan?
- ¿Qué nuevos recursos podría tener para alcanzar los objetivos?
4. SELECCIÓN DE ACCIONES
Las acciones dentro del plan deben ser lógicas y tienen que estar enfocadas a la consecución de los objetivos. Es importante seleccionar aquellas que son viables y puede realizarse en un corto periodo de tiempo.
5. ELABORACIÓN DEL PLAN
Una vez determinamos aquello que queremos, sus razones y los recursos de los que disponemos, necesitamos orientar las acciones que nos llevarán a cumplir con el objetivo. Un plan de acción detallado con todos los pasos a seguir desde la meta final, retrocediendo hasta el presente. Es muy importante contar con aquellos planes que puedan iniciarse hoy mismo. El plan de acción consistirá en un listado de acciones específicas que consideremos importantes para conseguir el objetivo. El número de acciones dependerá, obviamente del objetivo en sí, las opciones y de la persona. Elige aquellas que pienses que puede ayudarte a mejorar tu posición para alcanzar el objetivo (máximo 6 acciones)
6.SEGUIMIENTO
La etapa de seguimiento del plan será fundamental para verificar que vamos por el buen camino. La perseverancia es la base de esta etapa. Es importante la motivación y la continuidad en aquello desarrollado. Muchas personas, en esta etapa especialmente, sienten la necesidad de contar con un coach que les ayude en el seguimiento de las acciones.
Tu cuaderno self coaching
- Hazlo por escrito.
Escribe tus planes, pensamientos y sentimientos. Según numerosos estudios, al escribirlos de forma diaria, se consigue aumentar la motivación y las probabilidades de éxito. Dispón de un cuaderno dedicado al viaje del self coaching para todas tus anotaciones.
- Celebra tus éxitos.
Cuanto más reconozcas tus éxitos y logros, construirás las bases para la autoconfianza. Toma tu tiempo para registrar en tu cuaderno aquellos logros ya que es una forma de consolidar el proceso poco a poco.
- Conductas poco positivas.
Crea un listado con aquellas conductas o hábitos que consideres que no ayuden en el proceso. Es una forma de darnos cuenta de nuestros errores para no volver a caer en ellos y centrarnos en aquellas fortalezas y habilidades fructíferas en el proceso.
- Aborda el objetivo fragmentándolo.
Fragmentando el objetivo en pequeños pasos, te permitirá abordarlo de forma más fácil. Para ello te proponemos una técnica que consiste en dibujar un círculo en tu cuaderno y dentro de éste otro círculo que deberás dividir en seis partes. En el centro escribirás tu meta u objetivo y en las porciones aquellas pequeñas acciones que ayudarán a conseguir el objetivo.
- Armonía.
Cada uno conoce que es aquello que le carga de energía. El estar en contacto con la naturaleza, leer un buen libro, escuchar música…Estas actividades son las primeras que se descuidan cuando el estrés aparece, cuando en realidad deberían llevarse a cabo para lidiar con él. Es importante anotarlas en el cuaderno y valorar aquellas que pueden convertirse en cotidianas. La programación de estas actividades te permitirá ser más consciente de ellas y analizarlas para integrarlas como hábitos.